Todo el cuerpo duele y molesta aquí y allá. ¿Será por la edad o por el clima? Si no tienes ninguna enfermedad crónica especial, deberías sospechar de una inflamación.

De hecho, la inflamación aguda que ocurre durante el proceso de curación también puede ser beneficiosa para nuestro cuerpo. El sistema inmunológico del cuerpo responde enviando glóbulos blancos a la zona lesionada, lo que provoca una reacción inflamatoria intensa temporalmente para ayudar en el proceso de curación.

Pero la inflamación crónica puede poner en peligro la salud. La inflamación crónica a largo plazo también se considera una causa de diversas enfermedades, incluyendo hipertensión y accidente cerebrovascular. Basándose en información de medios de salud y medicina en Estados Unidos como 'Healthline', se han organizado formas de reducir la inflamación crónica en el cuerpo.

Aumentar el consumo de alimentos antiinflamatorios

 

Según estudios relacionados con la inflamación, la dieta mediterránea, que se basa en pescados ricos en grasas saludables, cereales integrales, nueces y legumbres, reduce los niveles de inflamación. Por otro lado, una dieta pobre en verduras y compuesta por alimentos con alto contenido de azúcares, cereales refinados y grasas trans, fomenta la inflamación.

 

También es importante prestar atención a la relación entre la inflamación crónica y el consumo de alcohol. Por lo general, una cantidad adecuada para los hombres es de 2 vasos al día y para las mujeres de 1 vaso al día; exceder esa cantidad y beber en exceso aumenta los niveles de inflamación. En lugar de alcohol, consumir alimentos ricos en antioxidantes como uvas o bayas es efectivo para reducir la inflamación.

 

 

 

Alivio de tensión y estrés

 

Participar en actividades que reducen los síntomas y evitar el estrés también son buenas formas de disminuir la inflamación. La salud mental y el estrés desempeñan un papel en la generación de inflamación.

El yoga y la meditación son métodos comprobados para aliviar el estrés, y pasar tiempo con un amigo agradable también es una buena opción. En particular, la risa tiene efectos excelentes para reducir la rigidez de los vasos sanguíneos y el envejecimiento.

 

 

 

 

Reducir el consumo de azúcar

 

El azúcar reduce la función suprarrenal, que es responsable de liberar hormonas que ayudan a controlar la inflamación en el cuerpo. Además, el azúcar interfiere con las glándulas suprarrenales o los reguladores del estrés, lo que disminuye la capacidad del cuerpo para manejar el estrés.

Por supuesto, una cantidad adecuada de azúcar puede aumentar la energía y aliviar la fatiga, pero un consumo excesivo de azúcar acelera la respuesta inflamatoria del cuerpo. En particular, el consumo excesivo de azúcar puede conducir fácilmente a la obesidad y, cuando aumenta la grasa corporal, también eleva los niveles de inflamación en el cuerpo. Cuando tengas antojo de algo dulce, es mejor comer frutas naturales.

 

 

 

 

Mantener de 7 a 8 horas de sueño

 

La falta de sueño afecta casi todo, desde el aumento de peso hasta enfermedades cardíacas y inflamación. Según estudios relacionados, la falta de sueño está vinculada a un aumento en la proteína C reactiva (CRP), un indicador de respuesta inflamatoria. Aunque estés ocupado, es recomendable mantener un horario regular de sueño de 7 a 8 horas.

Actividad activa

 

Para liberarse de la inflamación crónica, lo más importante es aumentar la actividad en la vida diaria. Según estudios relacionados, hacer ejercicio de intensidad moderada aproximadamente 30 minutos, cinco veces a la semana, puede reducir los niveles de inflamación en un 12%.

Especialmente en la mediana edad, la falta de actividad puede aumentar la grasa visceral en el cuerpo. El aumento de grasa visceral eleva los niveles de inflamación en el cuerpo. Es importante usar las escaleras en lugar del ascensor y, en lugar de estar atrapado en el sofá durante el tiempo de descanso en casa, realizar estiramientos sencillos para aumentar la actividad en la vida diaria.

 

 

 

Esencial para dejar de fumar

 

El tabaquismo provoca una respuesta inflamatoria. En particular, el tabaco aumenta la proporción de depósitos de grasa y la formación de placas en las arterias, lo que contribuye a una inflamación crónica adicional.

A medida que las áreas cubiertas de placa, similares a bolas de nieve, proliferan, la inflamación rodea la zona. Este aumento puede causar una obstrucción que, si la placa se rompe, puede provocar un infarto. Si en el examen los niveles de inflamación aparecen por encima del rango normal, dejar de fumar es imprescindible.

 

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El dolor crónico será el sufrimiento de todos.

También hay dolores relacionados con el envejecimiento a medida que envejecemos.

 

Intenta practicar primero una de estas cosas y ve cómo te va.

Si es demasiado difícil hacerlo todo...

 

Creo que debo empezar a actuar con entusiasmo desde ahora.