Tomé una botella que llegó como regalo para mi madre y la probé. Al principio, era ácida y blanda, no era de mi estilo. En realidad, no me gustan mucho las cosas ácidas. Pensé en comer unas tres o cuatro, pero a medida que comía, quizás por acostumbrarme al sabor, de repente me empezó a dar ganas de comerla de nuevo, hasta el punto de que a veces me dan ganas de comerla.
Las diferencias de precio varían mucho según la marca. La colágeno de granada pura es económica, tiene buen sabor y es fácil de consumir en grandes cantidades, lo cual me gusta. Además, el envío gratuito es aún mejor.