Mi esposo sufre de sequedad ocular y alergias, así que suelo ir a esta clínica oftalmológica. Las instalaciones son amplias y cómodas. Dos oftalmólogos atienden y siempre están dispuestos a responder cualquier pregunta. El personal de enfermería también es muy amable. Aunque hay que esperar, merece la pena. ¡Recomiendo encarecidamente la Clínica Oftalmológica Jeil a todos los que vivan en Ilsan Dong-gu!